Por World energy trade    –  31 de octubre de 2024

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El uso de energía en los data centers a nivel global representa un desafío significativo en términos de sostenibilidad y responsabilidad ambiental.

Estas extensas instalaciones albergan miles de servidores y equipos de almacenamiento, facilitando el procesamiento de datos para una amplia gama de aplicaciones y servicios en línea.

La Agencia Internacional de Energía (AIE) considera que la inteligencia artificial (IA) y las criptomonedas duplicarán el consumo de energía de los centros de datos para 2026, y la AIE pronostica que el consumo total de electricidad de los data centers podría superar los 1.000 teravatios-hora (TWh) en ese año.

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Este crecimiento exponencial no está exento de consecuencias, y su consumo energético es uno de los desafíos más apremiantes que se enfrenta actualmente. Adicionalmente, en el caso de Venezuela, la transferencia a la tecnología 5G en telecomunicaciones es otro factor que incrementará el consumo.

Por ello, Corporación Solsica, respaldada por Vertiv, se encuentra a la vanguardia para proporcionar soluciones para infraestructuras críticas. Ambas empresas se han comprometido a desarrollar y ofrecer tecnologías que mejoren la eficiencia energética de los data centers.

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Ritmo acelerado
El uso de energía en los data centers a nivel mundial ha experimentado un aumento significativo en las últimas décadas, hasta 50 veces más por superficie que un típico edificio de oficinas comerciales, impulsado por la creciente demanda de servicios en la nube, el almacenamiento de datos y el procesamiento de información.

A nivel mundial, se estima que consumen aproximadamente 90 mil millones de kWh al año, lo que representa entre el 1% y el 3% de la demanda de electricidad mundial, según la AIE.

Este consumo plantea preocupaciones sobre su impacto ambiental y sostenibilidad a largo plazo. Abordar esta problemática de manera efectiva requiere adoptar enfoques innovadores y sostenibles en el diseño, construcción y operación de los data centers.

En la vanguardia
En este sentido, Corporación Solsica se enfoca en la integración de prácticas de virtualización y la adopción de servidores de alta densidad energética, optimizando así el uso de recursos y minimizando el impacto ambiental.

Expertos de la empresa señalan que los centros de datos requieren contar con aires acondicionados de precisión, que funcionen de forma óptima para mantener su operatividad, por lo que las compañías deben realizar inversiones oportunas en la actualización de ese tipo de equipos, ya que son vitales para el funcionamiento de los centros de cómputo.

Además, los sistemas de enfriamiento representan 40% del consumo energético de los data centers, por lo que las organizaciones deben tomar consciencia de lo fundamental que es su sustitución por nuevas tecnologías, ya que equipos más modernos o actualizados operan con mayor eficiencia energética, lo que a la vez contribuye a la disminución de costos de operación y de mantenimiento a largo plazo, y Solsica distribuye los mejores equipos de la marca Vertiv.

Otro punto de gran importancia en el ahorro energético de los Data Center es el diseño de los mismos, el tipo de gabinetes que se utilizan, su ubicación y el tamaño de los equipos de computación, todos los cuales cada vez tienden a ser de menor tamaño, precisamente para el ahorro de gasto en energía. De allí que Solsica asesora a sus clientes en el diseño y adquisición de todos esos equipos.

Además, la transición hacia fuentes de energía renovable, como la energía fotovoltaica (lograda mediante los paneles solares que ofrece Corporación Solsica), juega un papel crucial en la reducción del impacto ambiental de los data centers.

La inversión en energía solar, eólica, hidroeléctrica y otras formas de energía limpia no solo ayuda a mitigar las emisiones de carbono, sino que también promueve la independencia energética y estimula la innovación en el sector energético.

Los gobiernos y los reguladores deben definir políticas públicas de eficiencia energética, ofrecer incentivos fiscales para la adopción de tecnologías verdes y promover la divulgación transparente del consumo de energía y las emisiones de carbono por parte de los operadores.

La demanda mundial de electricidad creció un 2,2% relativamente modesto en 2023, frente al 2,4% en 2022. El crecimiento, sin embargo, está en camino de acelerarse a un 3,4% más alto en el período de pronóstico 2024-2026.

Foto tomada de pixabay.com

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