Por WORLD ENERGY TRADE
El director ejecutivo (CEO) y presidente de ExxonMobil, Darren Woods, dijo: “Seguimos enfocados en aumentar el valor a largo plazo para nuestros accionistas invirtiendo en nuestros activos de mayor rendimiento, preservando la solidez del balance y pagando un dividendo confiable”.
Los gastos de impuestos sobre la renta de Exxon del año pasado ascienden a casi cuatro veces el presupuesto de Guyana para 2020. Pero Guyana no recibió nada de ExxonMobil, sus socios, afiliados y subcontratistas en impuestos sobre la renta porque el ex ministro de Recursos Naturales, Raphael Trotman, negoció un contrato para las operaciones del bloque Stabroek que les otorga una exención fiscal permanente de todos los impuestos.
De manera similar, el vicepresidente ejecutivo y director financiero de Hess, John P. Rielly, reveló durante la llamada de ganancias de la compañía, que proyecta que sus gastos de impuestos a la renta de exploración y producción (E&P) ascenderán a entre 80 y 90 millones de dólares en 2021. De igual modo Guyana no obtendrá nada.
ExxonMobil es el operador del bloque Stabroek con una participación del 45%, mientras que Hess tiene una participación del 30%.
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Las condiciones de impuestos y regalías del acuerdo con Exxon
El acuerdo petrolero especifica en cuanto a impuesto y regalías, que Exxon y sus empresas afiliadas están exentas de cualquier impuesto, impuesto al valor agregado, impuesto especial, tasa, cargo u otro gravamen con respecto a los ingresos de las operaciones petroleras o de la propiedad mantenida, excepto por ejemplo en aranceles de importación, impuestos por servicios específicos realizados para empresas públicas o comerciales que no estén relacionados con ingresos derivados de operaciones petroleras, impuestos del gobierno local o rentas adeudadas al Gobierno por cualquier derecho sobre la tierra otorgada. La Ley de impuestos sobre la propiedad tampoco se aplica a Exxon.
Sin perjuicio de la exención de los diversos impuestos antes mencionados, el Ministro pagará el impuesto sobre la renta y las sociedades sobre la renta imponible de Exxon en nombre de Exxon con la participación del Gobierno en las ganancias petroleras.
Todo esto se traduce en que el artículo fiscal del acuerdo permite que Guyana entregue a las empresas certificados fiscales que demuestren que sus obligaciones fiscales están cubiertas.
Guyana se hace responsable de pagar estos impuestos en nombre de la empresa operadora y lo hará con las propias ganancias petroleras.
Guyana sin capacidad de renegociar el contrato
Guyana perderá US $ 653 millones en impuestos para el 2025, según el Director de Finanzas del Instituto de Economía y Análisis Financiero de la Energía, Tom Sanzillo.
El contrato se mantiene firmemente en su lugar por una cláusula de estabilidad rígida que requiere la aprobación de los socios del bloque de Stabroek para su renegociación.
Esta condición contractual ha sido criticada durante años, y los principales líderes del partido, así como los socios del bloque Stabroek, se han negado.
Si el gobierno intenta renegociar unilateralmente la provisión tributaria o cualquier otra provisión de una manera que afecte la economía del acuerdo, estaría obligado a compensar a los contratistas por cualquier pérdida en que incurran.
Si el gobierno ajusta sus leyes o códigos tributarios de una manera que afecte la economía del contrato, Guyana tendría que permitir que Hess y sus socios reemplacen y estén exentos de la enmienda.
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