Por Sergio Chapa, Kiel Porter
Chesapeake Energy Corp., el otrora poderoso explorador de esquisto que salió de la bancarrota a principios de este año, busca vender activos productores de petróleo en el sur de Texas por hasta $ 2 mil millones, según personas familiarizadas con el plan.
El productor con sede en Oklahoma City está trabajando con un par de asesores para ofrecer los activos en el esquisto Eagle Ford, dijeron las personas, que pidieron no ser identificadas porque las discusiones son privadas.
Una vez conocido por su crecimiento agresivo a través de adquisiciones durante el auge del esquisto, Chesapeake se unió a otros productores para solicitar protección por bancarrota el año pasado después de que la pandemia devastó la demanda de energía. Cuando la empresa abandonó la reestructuración en febrero, el director ejecutivo Doug Lawler declaró que era “una nueva era para el esquisto”.
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La venta potencial se produce en un momento en que la empresa anunció que Lawler se marchará el 30 de abril, después de ocho años en la empresa.
Reuters había informado anteriormente sobre el plan para los activos de esquisto de Eagle Ford. Chesapeake se negó a comentar.
En 2018, Lawler supervisó un acuerdo para comprar 420,000 acres de arrendamientos de Wildhorse Resources, con sede en Houston, en el extremo este de Eagle Ford, conocido como Brazos Valley.
El perforador de esquisto también posee y opera 220.000 acres de arrendamientos de petróleo y gas natural en el extremo occidental de Eagle Ford.