Por THE GUARDIAN 

China construyó más capacidad eólica en 2020 que todo el mundo junto en el año anterior, lo que supuso un récord anual de instalaciones eólicas a pesar de la pandemia de Covid-19.

Un estudio ha revelado que China ha liderado el mayor aumento de la capacidad de energía eólica del mundo, ya que los promotores construyeron el año pasado parques eólicos por valor de casi 100 GW, lo que equivale a suministrar energía a casi tres veces el número de hogares del Reino Unido y supone un aumento de casi el 60% respecto al año anterior.

La mayor parte de los nuevos parques eólicos del mundo se construyeron en tierra, lo que compensó con creces el descenso del 20% de la nueva capacidad eólica construida en el mar.

Según el informe de Bloomberg New Energy Finance, China construyó más de la mitad de la nueva capacidad eólica mundial. Sus parques eólicos terrestres y marinos crecieron en casi 58GW el año pasado, más que el crecimiento de la energía eólica combinada del mundo en 2019.

Isabelle Edwards, autora del informe, dijo: “Aunque todas las regiones encargaron más capacidad eólica que el año anterior, el crecimiento sin precedentes observado en 2020 debe atribuirse al mercado eólico chino”.

Los promotores chinos de energías renovables se volcaron en el mercado antes de la inminente interrupción de las nuevas subvenciones a la energía eólica por parte del Gobierno, y es probable que la demanda se ralentice el próximo año.

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China también construyó al menos 2/3 de las centrales eléctricas de carbón del mundo

Un informe separado, elaborado por los activistas estadounidenses de Global Energy Monitor, reveló que China también había construido casi dos tercios de las centrales eléctricas de carbón en funcionamiento del mundo.

En los seis primeros meses del año pasado, China albergaba casi el 90% de todas las centrales de carbón en construcción, y la mitad de la capacidad eléctrica de carbón en funcionamiento del mundo, según el informe.

El presidente de China, Xi Jinping, sorprendió a los delegados de la ONU el año pasado al anunciar que la economía de más rápido crecimiento del mundo se aseguraría de que sus emisiones llegaran a su punto máximo en los próximos cinco años y se reducirán a cero en 2060.

Pero los expertos han advertido de que el 14º plan quinquenal de China, publicado este mes, podría provocar un aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, después de que diera pocos detalles sobre cómo el mayor emisor del mundo cumpliría sus nuevos objetivos climáticos.

El fuerte crecimiento en EE.UU.

El auge de la energía eólica en China fue seguido por un boom en EE.UU., donde los promotores construyeron 16,5 GW de nueva capacidad eólica el año pasado, antes de la supresión de un programa gubernamental de créditos fiscales.

El récord de instalación de parques eólicos superó en tres cuartas partes al de 2019 y superó con creces el anterior récord de instalación del país, establecido en 2012.

En Europa, los nuevos parques eólicos añadieron 12,6GW de capacidad de energía renovable el año pasado, incluyendo el parque eólico Borssele de 752MW en los Países Bajos y una estación de 539MW en el proyecto East Anglia One en el Reino Unido.

El crecimiento de los parques eólicos en China y EE.UU. también desbancó a la danesa Vestas de su puesto de mayor fabricante de aerogeneradores del mundo por primera vez en cinco años.

La empresa fue usurpada por la estadounidense GE y la china Xinjiang Goldwind, que eran los dos principales proveedores de turbinas a nivel mundial.

“GE y Goldwind se hicieron con los dos primeros puestos de la clasificación de este año al concentrarse en los mercados más grandes. Esta estrategia puede no ser tan fructífera en 2021, ya que los subsidios desaparecen en esas zonas”, dijo Edwards. “Vestas asume menos riesgo de mercado, con turbinas encargadas en 34 países el año pasado”.

Vestas espera convertirse en uno de los principales actores del mercado mundial de la energía eólica marina para 2025, tras acordar la compra del 50% de la participación de Mitsubishi Heavy Industries en su empresa conjunta, MHI Vestas.

Bert Nordberg, presidente de Vestas, dijo que el acuerdo, por un valor de casi 710 millones de euros (610 millones de libras), era el “comienzo de un nuevo capítulo en la historia de Vestas” que ofrecería grandes oportunidades a medida que se acelerara el despliegue de las energías renovables.

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