Por David Yaffe-Bellany
Exxon Mobil Corp. puede seguir adelante con una demanda en Estados Unidos que busca $ 280 millones de dos empresas cubanas como compensación por una refinería y otros activos incautados al gigante petrolero después de la revolución de Fidel Castro en 1959, dijo un juez en Washington.
El fallo del juez de distrito estadounidense Amit Mehta mantiene viva la demanda de Exxon contra un conglomerado del gobierno cubano, Corporación Cimex SA, y la petrolera estatal Unión Cuba-Petroleo, conocida como Cupet. A lo largo de los años, el gobierno de los Estados Unidos ha reconocido miles de reclamaciones de este tipo por parte de empresas e individuos sobre propiedades que alguna vez fueron propiedad de estadounidenses.
Exxon presentó su caso en 2019 después de que la administración Trump dijera que ya no bloquearía una disposición de una ley estadounidense de 1996 que permite demandas privadas por propiedades incautadas en Cuba, un cambio de política que, según algunos expertos legales, provocaría un aumento en las reclamaciones. Pero eso no ha sucedido, en parte porque puede ser difícil hacer cumplir los juicios financieros contra empresas en países extranjeros, dijo Patrick Borchers, profesor de derecho en la Universidad de Creighton que ha estudiado el tema.
“Los posibles demandantes mucho más cautelosos se sentaron para ver cómo iban las cosas”, dijo Borchers.
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En 2014, el presidente Barack Obama trató de establecer lazos diplomáticos con Cuba y aliviar las barreras económicas, aunque la nación insular permanece tan aislada como siempre después de fracasar en hacer las paces con los acreedores extranjeros. Eso ha dejado más de 5.900 reclamaciones de expropiación en el limbo.
Exxon dijo que Cimex y Cupet participaron en “tráfico ilegal de propiedad confiscada del demandante”, incluidos cientos de estaciones de servicio, tanques de almacenamiento, una terminal marítima y la refinería Ñico López en La Habana. El gobierno de Castro reclamó los activos en 1960.
“Estamos de acuerdo con la decisión de la corte de permitir que proceda este reclamo”, dijo el portavoz de Exxon, Todd Spitler, en un correo electrónico. “La decisión continúa respaldando nuestro reclamo de que ExxonMobil reciba una compensación por sus activos expropiados”.
Las dos empresas cubanas habían buscado desestimar la demanda, argumentando que son agencias de un gobierno extranjero y, por lo tanto, inmunes a la denuncia bajo la Ley de Inmunidades Soberanas Extranjeras.
Mehta dictaminó que una excepción en el estatuto significa que la queja de Exxon contra Cimex puede continuar. También permitió que la empresa estadounidense recopilara pruebas para probar si sus reclamos contra Cupet son legalmente viables.
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