Por World energy trade – 03 de junio de 2024
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Los precios del gas natural en Europa alcanzaron su nivel más alto del año tras la caída de los flujos procedentes de Noruega, lo que pone de manifiesto el riesgo de depender demasiado de un único proveedor.
Los futuros del gas holandés subieron más de un 13% este lunes, la mayor subida del año, según recoge Energy Voice. No está claro cuánto durará una interrupción imprevista en la enorme planta de procesamiento de gas noruega de Nyhamna.
Paralelamente, se interrumpieron los flujos noruegos a la terminal británica de Easington, punto de entrada de un tercio del suministro total de Gran Bretaña.
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Noruega, pieza clave en el suministro
Los cortes muestran el papel fundamental que desempeña Noruega en el abastecimiento del resto de Europa después de que se interrumpieran la mayoría de las entregas de los gasoductos rusos tras la invasión de Ucrania.
Incluso tras la crisis energética, el mercado sigue siendo muy sensible a los problemas de suministro, y los precios reaccionan con rapidez cuando se produce cualquier desviación de los planes de mantenimiento estacionales previstos.
«Como europeos, dependemos del resto del mundo para nuestro suministro energético, y esa es una situación vulnerable», dijo en una entrevista Jesper Johanson, director ejecutivo de la comercializadora danesa InCommodities A/S.
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Equinor ASA está planificando las reparaciones de un segmento del gasoducto del yacimiento de Sleipner, en el Mar del Norte, y el operador, Gassco AS, estudia la forma de redirigir el gas si los daños provocan un corte prolongado, según Alfred Skar Hansen, vicepresidente senior de Gassco para el funcionamiento del sistema.
Más tarde, la empresa confirmó a través de un comunicado que la interrupción está relacionada con «restricciones de transporte en el tubo ascendente de Sleipner» y tendrá una «duración incierta».
Sleipner se encuentra entre la planta de Nyhamna y la terminal de Easington y está conectada por los oleoductos de Langeled.
Los futuros holandeses a un mes, la referencia europea del gas, subieron un 5,9%, hasta 36,24 euros el megavatio-hora, a las 16.19 horas en Ámsterdam. El contrato equivalente en el Reino Unido subió hasta un 15%, la mayor subida desde octubre.
El repunte se produjo incluso con las instalaciones de almacenamiento llenas en un 70% y una lenta recuperación de la demanda industrial en Europa. Los futuros del gas llevan tres meses consecutivos al alza, con un salto del 18% en mayo.
Mientras que Europa solía depender de Rusia para un tercio de su gas, la región depende ahora cada vez más del gasoducto noruego y de los suministros de gas natural licuado de EE.UU. y Qatar.
Además, las importaciones de GNL a Europa han disminuido en las últimas semanas debido al aumento de la demanda en Asia, donde la ola de calor está incrementando el consumo para refrigeración.
De acuerdo con Ole Hansen, responsable de estrategia de materias primas de Saxo Bank A/S, esto está impulsando la competencia por los cargamentos.
Los futuros del gas natural estadounidense subieron un 5,9% a las 10:15 de la mañana en Nueva York.
La atención se centra también en las interrupciones en algunas instalaciones mundiales de GNL.
En los mercados energéticos, la electricidad diaria alemana bajó desde el máximo desde noviembre, estableciéndose en 107,23 euros por megavatio-hora, en Epex Spot SE. El contrato de julio también subió hasta alcanzar el precio más alto desde enero.
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