Por ARGUS MEDIA – 20 OCTUBRE 2021
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La escasez de energía que afecta al Reino Unido y a Europa alimentará la demanda de una transición ecológica más rápida y de los metales necesarios para llevarla a cabo, según los ponentes de la segunda conferencia Investing in Cornish Mining, celebrada hoy en Falmouth.
La escasez de combustible y energía ha puesto de manifiesto la urgencia de abandonar la dependencia de los combustibles fósiles para pasar a los vehículos eléctricos y a las fuentes de energía renovables, según los delegados.
“El año 2021 ha visto cómo el cambio a los vehículos eléctricos ha dado un paso adelante, y el ritmo del cambio se está acelerando mucho más rápido de lo que nadie esperaba. La reciente escasez de combustible en el Reino Unido ha supuesto un nuevo impulso para la compra de vehículos eléctricos, y las búsquedas en línea de vehículos eléctricos desde la escasez han aumentado en 1.600 puntos”, dijo el director ejecutivo de Cornish Lithium, Jeremy Wrathall.
Las cadenas de suministro locales y sostenibles son vitales
El aumento de los precios de las materias primas a nivel mundial también ha puesto de manifiesto la creciente necesidad de contar con cadenas de suministro regionales.
Los precios del litio, el estaño y el cobre están en máximos históricos en medio de graves cuellos de botella en la cadena de suministro, ya que las economías luchan contra las restricciones de Covid-19 y las redes de transporte están sometidas a una presión especial.
“Las cadenas de suministro se están reexaminando a la luz de la geopolítica actual. Los metales ya escasean y la mayoría de los yacimientos de fácil acceso en todo el mundo ya han sido descubiertos y explotados”, dijo Wrathall a los delegados. “El mundo ya no puede confiar en las cadenas de suministro tradicionales, Covid-19 nos ha enseñado que […] todos los metales necesarios para la transición a la energía renovable se han encontrado en Cornualles en el pasado, incluyendo cobre, níquel, cobalto, estaño e incluso litio”.
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En el Reino Unido en concreto, las normas de origen que entraron en vigor cuando el Reino Unido abandonó la UE especifican que, para 2027, el 55% de todos los componentes de los vehículos eléctricos deben proceder del Reino Unido para poder exportarlos a la UE sin aranceles, lo que crea una necesidad especialmente urgente de una cadena de suministro de materias primas locales.
“La oportunidad de abastecerse de materiales en el Reino Unido tiene que ser atractiva no sólo para Cornualles, sino también para el gobierno británico en Westminster”, dijo Richard Williams, presidente de Cornish Metals. “Además, los usuarios finales exigen cada vez más que los productos se adquieran de forma responsable y ética”, dijo, señalando los proyectos de estaño en Myanmar, con dudosos vínculos con conflictos, y las dificultades de seguridad medioambiental en Indonesia.
“Australia Occidental produce dos tercios del litio mundial, por lo que en el Reino Unido estamos atrasados y tenemos que ponernos al día, pero tenemos que hacerlo de forma rentable y más sostenible para poder competir con los australianos”, afirmó el director ejecutivo de British Lithium, Andrew Smith.
Smith señaló que, aunque la producción de litio en Cornualles no puede competir en términos de volumen y grado, puede ser más sostenible que en Australia, que alimenta gran parte del país con carbón térmico, mientras que los proyectos sudamericanos utilizan cantidades excesivas de agua en regiones áridas.
Los precios del hidróxido de litio han subido a 27,00-27,50 $/kg fob China desde los 8,50-10,00 $/kg de principios de 2021 por la fuerte demanda de los sectores de vehículos eléctricos en China y Europa.