Por World energy trade – 24 de abril de 2024
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Si bien la producción general está en niveles récord, la cantidad de petróleo recuperado por pie perforado en la Cuenca Pérmica de Texas, la principal formación de shale de Estados Unidos, cayó un 15% de 2020 a 2023, lo que la pone a la par con hace una década, según el investigador de energía Enverus.
Eso se debe a que el fracking, el método de extracción que surgió a mediados de la década de 2000, se ha vuelto menos eficiente allí. En esta técnica, se inyectan agua, arena y productos químicos a alta presión bajo tierra para liberar los recursos atrapados.
Dos décadas perforando pozos relativamente cerca unos de otros, lo que ha dado lugar a cientos de miles de pozos, han interferido en la presión subterránea y han dificultado la extracción de petróleo del subsuelo.
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Pero las nuevas innovaciones en yacimientos petrolíferos, que empezaron a aplicarse de forma más generalizada el año pasado, han hecho posible que el fracking sea más rápido, menos costoso y de mayor rendimiento.
Los avances de los últimos años incluyen la posibilidad de duplicar la longitud de los pozos laterales hasta tres millas y equipos que pueden fracturar simultáneamente dos o tres pozos. Las bombas eléctricas pueden sustituir a los equipos diésel, de alto costo y mantenimiento.
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Ahora las empresas pueden perforar pozos más rápido y más barato. Sin embargo, un inconveniente de la nueva tecnología de fracturación simultánea, también llamada simul-frac, es que las empresas necesitan tener muchos pozos perforados y listos para pasar a la fase de fracturación al unísono antes de poder proceder.
Las bombas inyectan fluidos y extraen petróleo y gas de dos o tres pozos al mismo tiempo, en lugar de uno solo.
Debido a que actúan como un sistema interconectado, los pozos no pueden añadirse poco a poco. Pero las empresas, deseosas de reducir costos, no han desplegado suficientes equipos de perforación para aprovechar plenamente el potencial de estas innovaciones.
«En lugar de perforar los pozos y obtener producción en unos meses, hay que perforar ocho o diez pozos», explica Mike Oestmann, Director General de Tall City Exploration.
«Eso supone 100 millones de dólares en el suelo antes de ver ningún ingreso», dijo. «Para empresas pequeñas como Tall City, es un gran reto».
El número de equipos de perforación activos en EE.UU. este mes cayó casi un 18% con respecto a hace un año.
El simul-fracking también puede reducir los costos de los pozos entre 200.000 y 400.000 dólares, es decir, entre un 5% y un 10% por pozo, según Thomas Jacob, vicepresidente de Rystad Energy.
La nueva tecnología respalda una producción récord
Los analistas petroleros prevén que el uso de la nueva tecnología se acelere. En el segundo semestre del año pasado se observó una tendencia de las empresas a recurrir a los simul-fracs, y esto no hará sino continuar.
La mayor longitud de los pozos y los avances en las técnicas de fracturación están compensando con creces el descenso de la productividad y el limitado número de plataformas, lo que ha contribuido a que Estados Unidos alcance volúmenes récord de producción de petróleo.
Según la Administración de Información Energética de EE.UU., se prevé que las principales regiones productoras de shale alcancen el mes que viene su mayor producción en cinco meses, con un aumento de la producción de nuevos pozos del 28% respecto al año anterior.
«Las empresas están haciendo una puesta a punto y mejorando cada vez más en fracking», dijo Oestmann. «Sin ellas, la producción caería».
Las innovaciones van a ganar escala una vez que los principales productores como Exxon Mobil Corp y Chevron Corp las adopten más ampliamente, dijeron los expertos en shale.
Las empresas medianas de shale, como Pioneer Natural Resources, que pueden permitirse los costos, fueron las primeras en adoptar los nuevos métodos. Los resultados positivos las hacen más atractivas para grandes empresas como Exxon, que está a la espera de la aprobación reglamentaria para comprar Pioneer.
Pero los mayores productores de shale se han comprometido a utilizar los ingresos del petróleo para financiar los beneficios de los accionistas en lugar de la expansión de las perforaciones.
Dos de los mayores operadores de shale oil, Exxon y Chevron, han incumplido sus objetivos de producción en el Pérmico en los últimos años.
Exxon afirmó que su nueva tecnología de fracturación hidráulica le permitirá extraer 700.000 barriles adicionales de petróleo equivalente al día (boepd) de los activos de Pioneer de aquí a 2027, triplicando la producción hasta los 2 millones de boepd.
Chevron está incrementando el uso de simul-fracs y afirma que la técnica le ayudará a aumentar la producción del Pérmico en un 10% este año, hasta 900.000 boepd.
También ha completado un proyecto piloto de fracturación triple y prevé utilizarlo más ampliamente, según un portavoz.
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