Por NARIMAN GIZITDINOV
Royal Dutch Shell, Eni y sus socios en la empresa de petróleo y gas Karachaganak pagaron 1.300 millones de dólares para resolver una disputa de larga duración con Kazajstán sobre el reparto de ingresos.
El acuerdo desbloquea planes para impulsar la producción del campo Karachaganak y canaliza ingresos adicionales a la economía kazaja, que se encamina a su primera contracción anual en más de dos décadas en medio de la caída del petróleo. Si bien el gobierno está obteniendo menos efectivo de lo que exigió el año pasado, es un pago mayor al acordado inicialmente en 2018.
Además del acuerdo en efectivo de 1.300 millones de dólares, los socios aprobaron los términos finales de producción compartida, y Kazajstán obtendrá hasta 600 millones de dólares hasta 2037 con petróleo a 40-50 dólares el barril, dijo el lunes el Ministerio de Energía del país.
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El campo Karachaganak, uno de los mayores depósitos de hidrocarburos de Kazajstán, es operado conjuntamente por Shell y Eni con una participación del 29,25% cada uno. Los otros socios son Chevron Corp., Lukoil PJSC y la petrolera estatal KazMunayGas National Co.
El acuerdo es un “paso muy positivo” que asegura “certeza fiscal en Karachaganak”, dijeron Shell y Chevron en declaraciones casi idénticas. Lukoil no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. Eni no pudo comentar de inmediato.
Con la disputa de cinco años resuelta, los socios pueden seguir adelante con un proyecto de expansión planificado de mil millones de dólares “para apoyar la meseta de producción”, dijo el ministerio por correo electrónico.
Kazajstán tiene un historial de disputas con inversores internacionales sobre sus proyectos energéticos. En 2012, los socios de Karachaganak vendieron parte de sus participaciones al estado para resolver una disputa sobre impuestos y costos. El desacuerdo más reciente comenzó en 2015 después de que el gobierno exigiera una mayor participación en los ingresos de la empresa. Había solicitado hasta 1.800 millones de dólares para reclamaciones relacionadas con la recuperación de costos y la distribución de ganancias, según Lukoil.
