Por VICTORIA TERZAGHI
Si bien la etapa más complicada de la pandemia para la industria petrolera parece haber quedado atrás, las exportaciones del petróleo argentino tuvieron un fuerte crecimiento en el inicio de este año y tan solo en enero sumaron más de dos millones de barriles.
De acuerdo a los registros oficiales, durante enero se exportó un total de 2.077.092 barriles, es decir unos 67.000 barriles de petróleo por día.
Este nivel es un 49,57% superior al registrado apenas el mes anterior, en diciembre. Pero también marca un salto del 78,67% en relación con enero del 2020, un mes en el que el impacto de la pandemia en los niveles de consumo no se evidenciaba en Argentina.
Claramente el volumen exportado no es tan alto como en plena pandemia, cuando sobraba petróleo en todo el mundo, pero en esta ocasión da cuenta de que ante un consumo interno estable -y aún levemente por debajo de los valores prepandémicos- se están generando buenos saldos exportables.
Pero además de un buen ritmo de exportaciones, durante enero se dieron otros dos puntos positivos más. Por un lado volvió a exportarse el crudo liviano por excelencia del país, el Medanito que fluye mezclado con el shale de Vaca Muerta.
Este tipo de petróleo liviano comenzó a exportarse en junio del año pasado tras varios años sin salir del país, pero esas exportaciones fueron irregulares ya que tanto en octubre como en diciembre el crudo de la Cuenca Neuquina no llegó al puerto de Rosales.
Sin embargo, en enero fueron dos las empresas que exportaron este petróleo liviano formado tanto por producción de Neuquén, mayoritariamente de Vaca Muerta, como también por el crudo convencional de los campos de Río Negro.
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En tanto que la segunda buena noticia, y la gran causa del incremento de las exportaciones, fue el aumento de los precios internacionales del crudo que permitieron mejorar el valor que se pagó por cada barril.
En promedio durante enero se pagaron 50,18 dólares por barril, esto es dos dólares más que lo que se había abonado el mes anterior. Pero dentro de ese valor promedio el Escalante fue nuevamente el que se posicionó con el mejor retorno ya que se cotizó a 56,84 dólares por barril.
El Medanito en tanto tuvo un precio promedio de 46,97 dólares, mientras que la variante San Sebastián fue una de las que tuvo los mayores descuentos y terminó recibiendo solo 41,04 dólares por barril. El año pasado por el contexto de sobreoferta se llegaron a pactar exportaciones a tan solo 9 dólares por barril.
Si bien como es habitual las exportaciones de Escalante fueron las más voluminosas, el Medanito se ubicó en el segundo lugar con nada menos que 756.000 barriles, mientras que el San Sebastián sumó 150.000 barriles.
En lo que hace a las empresas, Pan American Energy (PAE) se mantuvo como la principal exportadora ya que es la que envió más de un millón de barriles de Escalante. La petrolera de Miguel Galuccio, Vista Oil&Gas sigue afianzándose en el terreno exportador y nuevamente fue la segunda firma con un volumen de 620.800 barriles en el mes.
YPF se posicionó en el tercer puesto con 150.000 barriles, seguida por Tecpetrol que exportó 135.500 barriles de Medanito.
Y completaron el escenario exportador la Compañía General de Combustibles (CGC) con 84.000 barriles y Enap con 45.000.
Los pedidos de exportación acumulan más de 15 millones de barriles
Entre que una empresa presenta un pedido de exportación y la misma se concreta hay un amplio trecho, ya que no solo puede no llegar a un acuerdo por el precio sino también ser requerida esa producción en el mercado nacional. Pero sin dudas, son los pedidos los que marcan el ánimo que impera entre las empresas productoras.
En lo que va del año ya se presentaron 51 pedidos para exportar petróleo, varios de los cuales se concretaron.
El volumen total que las empresas consideraron en esos pedidos de exportación llega a los 15 millones de barriles y revela el fuerte interés de las empresas, en especial las afincadas en Vaca Muerta, por mantener abierta la senda exportadora.
De acuerdo a los pedidos presentados algunas empresas avanzan hacia lo que podría ser exportaciones regulares en el crudo liviano, como son Vista Oil&Gas, Shell y Tecpetrol. Pero también hay algunos pedidos de exportación más llamativos.
En el caso de la Compañía de Hidrocarburos No Convencionales (CHNC), la razón social que comercializa la producción del área emblema de Vaca Muerta para YPF y Chevron como es Loma Campana, se presentaron pedidos con una frecuencia casi mensual.
En tanto que la compañía malaya Petronas también apostó al mercado exportador para colocar parte de la producción que tiene en el área La Amarga Chica que también opera YPF. La firma asiática pidió permiso para exportar a partir de este mes unos 350.000 barriles en cada envío.
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